Malas noticias para Bioshock 4: al parecer, una demo interna de la secuela no ha convencido a la editorial 2K. Esto tiene ahora consecuencias personales.
Los fans de Bioshock no lo tienen fácil en estos momentos: hace más de diez años que no sale una nueva entrega de la aclamada serie de shooters; la última entrega, Infinite, se remonta ya a 2013. Y, según se ha sabido ahora, los fans tendrán que esperar aún un poco más.
Aunque la editorial y propietaria de los derechos, 2K Games, ya anunció a finales de 2019 que había encargado al estudio Cloud Chamber el trabajo en un nuevo Bioshock, desde entonces no se ha sabido nada del proyecto. Según informa ahora, entre otros, el bien informado Jason Schreier, el juego se enfrenta a un futuro incierto.
Al parecer, Bioshock 4 no ha convencido a los directivos de la editorial 2K Games en las pruebas internas. Por este motivo, se va a sustituir a la dirección de la empresa desarrolladora Cloud Chamber.
Fuentes anónimas que Jason Schreier en su informe para Bloomberg afirmaron que, sobre todo, la trama del juego se identificó como un aspecto que debía mejorarse y que se revisaría en los próximos meses
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Como consecuencia, el desarrollador jefe Kelley Gilmore fue despedido y sustituido por el hasta ahora director creativo Hogarth de la Plante. Al resto del equipo de Cloud Chamber se le comunicó en una reunión interna que el estudio debía ser «más ágil y eficiente». Según Bloomberg, varios empleados temen que estas declaraciones sean un indicio de próximos despidos.
En respuesta al informe, un portavoz de 2K Games confirmó a Bloomberg el cambio en la dirección del estudio. Al mismo tiempo, sin embargo, se reafirmó el compromiso de «entregar un juego BioShock que supere las altas expectativas de los fans». El editor añade:
Estamos trabajando duro para preparar BioShock para el mejor futuro posible. Por ahora tenemos un buen juego, pero estamos decididos a ofrecer un juego excelente. Estamos colaborando estrechamente con la dirección del estudio para definir el camino a seguir.
Sin embargo, este futuro mejor parece todo menos prometedor, ya que, según ha confirmado 2K Games a Bloomberg, hace unos meses se decidió suspender el desarrollo de una nueva versión del primer juego de la serie Bioshock, que ya se había iniciado. El editor no ha dado razones para ello.
Las tres primeras entregas de la serie Bioshock tuvieron un gran éxito comercial, con más de 43 millones de copias vendidas; sin embargo, el creador de la serie, Ken Levine, no quería desarrollar una nueva entrega debido a la gran presión personal tras Bioshock: Infinite, por lo que redujo drásticamente su estudio Irrational Games.
Sin embargo, según informes de Eurogamer, actualmente se está trabajando en una serie de Netflix basada en la franquicia. No obstante, se realizaría con un presupuesto reducido y no sería un gran éxito de taquilla.
¿Qué opináis de las novedades en el universo Bioshock? ¿Tenéis ganas de ver una cuarta entrega de la serie de shooters? ¡Dejad vuestros comentarios!
